AMON AMARTH + DARK TRANQUILITY + OMNIUM GATHERUM - HANGAR, BURGOS // 11-04-2017


La promotora Madness Live anunciaba hace unos meses nuevas fechas de los suecos AMON AMARTH encabezando su exitosa gira denominada “JOMSVIKING European Tour 2016-2017”, acompañados por los veteranos de guerra DARK TRANQUILITY y OMNIUM GATHERUM. En esta ocasión el Hangar de Burgos estuvo a punto de colgar el “Sold Out”.


Los vikingos de Tumba, Suecia, siguen cosechando noches memorables para el recuerdo. Después de visitar junto a TESTAMENT y GRAND MAGUS las ciudades habituales, Bilbao, Madrid y Barcelona, y reventar las salas, en esta nueva visita al estado se atrevían con ciudades nada usuales como Málaga, Burgos o Zaragoza, donde estaba todo el papel vendido.

El Hangar está ubicado en lo que fuera la antigua Estación Común de Burgos, construida a mediados del siglo XX por Renfe y el Ministerio de Obras Públicas. En la actualidad se ha convertido en el recinto con mayor capacidad para actuaciones musicales de la ciudad.


Según el público iba accediendo y cogiendo posiciones, los primeros en aparecer a escena fueron OMNIUM GATHERUM. Como suele ocurrir en estas ocasiones, los encargados de abrir tienen que ocupar un reducido espacio donde apenas se pueden ni mover, y eso le ocurrió a los de Karhula.

Emprendieron su corta actuación con “The Pit”, para proseguir con “Skyline”. Mostraron un talento y disposición que nos dejaron a todos unas fantásticas sensaciones.

Su vocalista Jukka Pelkonen nos presentaba el siguiente corte, “Frontiers”, seguido de “The Unknowing” y el tema que cierra su último trabajo de estudio “Grey Heavens”, titulado “Storm Front”, mostraron que los fineses tienen las ideas muy claras y que defienden esa mezcla entre Death melódico y toques progresivos. OMNIUM GATHERUM tienen una amplia trayectoria y, aunque no sean demasiado conocidos, son una apuesta muy a tener en cuenta.


Los encargados de recoger el testigo, tras la descarga de OMNIUM GATHERUM, serían los veteranos DARK TRANQUILITY. El sexteto sueco hace unos meses que puso en circulación su nueva reliquia, “Atoma”, publicado a través de Century Media.

Si hay algo que siempre ha caracterizado las descargas de los death metaleros melódicos ha sido la intensidad. Los de Gotemburgo empezaban a desgranar su último lanzamiento con el ataque guitarrero de Johan Reinholdz al que nos sometieron con “Force Of Hand”, mientras el simpático Mikael Stanne sonreía y animaba al personal constantemente.


El ataque de DARK TRANQUILITY fue despiadado y el nivel de intensidad, lejos de decaer, continuaría en ascenso al anunciarnos Mikael el vertiginoso “The Lesser Faith”, que nos dejaría el escenario envuelto en humo mientras la banda machacaba sin compasión sus instrumentos y el público castigaba sus cervicales.

La siguiente en hacer acto de presencia sería “Atoma”, en la que el combo sueco supo conjuntar a la perfección su habitual velocidad con unos pasajes más crudos y machacones. Aunque el grueso de su descarga estuvo centrado en sus plásticos más recientes, tampoco quisieron dejarse en el tintero melodías como “Forward Momentum” y “Terminus”.


DARK TRANQUILITY se mostraron totalmente intratables, consiguiendo que los coros de temas como “Therein” se convirtieran en la excusa perfecta para que los más animados levantaran sus puños al aire para corearlos.

Con la base rítmica marcando incansablemente el paso y con la gente volviendo a erigirse como protagonista, llegaba el momento de “The Wonders At Your Feet”, toda una declaración de intenciones que se convertiría en el marco perfecto para un “Headbanging”. Desgraciadamente, el tiempo estaba tocando a su fin, pero antes de despedirse definitivamente todavía tendrían tiempo de agasajar los tímpanos con la fantástica “Misery´s Crown”.

A pesar de una hora escasa, gran concierto de DARK TRANQUILITY en su visita a la ciudad castellana, del que creo poder decir que dejó al respetable más que satisfecho.

Tras el habitual cambio de backline, llegaba el turno de las estrellas de la noche, AMON AMARTH. Los suecos irrumpieron en el escenario con “The Pursuit Of Vikings”, consiguiendo que toda la audiencia congregada en el Hangar acabara cayendo rendida ante semejante despliegue de velocidad, técnica y contundencia. La puesta en escena era maravillosa para introducirte en el universo vikingo. Un enorme casco con su cornamenta estaba situado en el centro del escenario, donde iba colocada la batería del chileno Jocke Wallgren. Sin dar un respiro sonaron “As Loke Falls” y “First Kill”, comandados por un carismático Johan Hegg la banda nos ofreció una clase magistral de lo que debe ser un concierto de Death Melódico: agresividad, temas con pegada y, ante todo, actitud.


La actuación seguía sus cauces con “The Way Of Vikings”, donde dos vikingos con espadas, cascos y armaduras tuvieron una intensa lucha en el centro del escenario, y como era de esperar, solo podía quedar uno en pie.

Sin duda, si hay una palabra que pueda definir la descarga que nos ofrecieron AMON AMARTH, esa es intensidad, ya que la banda fue descargando, cual hachazos sobre nuestras cabezas, temas como la combatiente “At Dawn´s First Light”, que servían para que las guitarras de Johan Söderberg y Olavi Mikkonen taladraran nuestros tímpanos sin piedad. Pese a ello, el vocalista Johan Hegg se mostró como un torbellino desatado sobre las tablas, haciendo mover a todos los presentes mientras no dejaba de hacer molinillos con la cabeza. De modo que las siguientes en sonar fueron “Cry Of The Black Birds”, “Deceiver Of The Gods” y “On A Sea Of Blood”, que sería la encargada de marcar el ecuador del show para convertirse en el preámbulo perfecto para la bestialidad sónica que nos propuso “Destroyer Of The Universe”.


La fiesta vikinga de los suecos proseguiría con la base rítmica, formada por Ted Lundström y Jocke Wallgren, marcando el machacón arranque de “Death In Fire”, que significó su única incursión en “Versus The World”, un trabajo que pasó un tanto desapercibido en su momento, pero que sigue conservando intacta su áspera pegada. Conforme iba avanzando el show todos éramos conscientes de que la última parte del concierto tendría que estar reservada para las piezas clásicas de su discografía.

Con el personal completamente extasiado y mientras el escenario se cubría de humo, nuestro viaje al pasado proseguiría con “One Thousand Burning Arrows”, de su reciente “Jomsviking”, donde hicieron acto de presencia los arqueros apuntando con sus arcos y flechas al público. La innegociable “Father Of The Wolf”, “Runes To My Memory” y la abominable “War Of The Gods”, que volvía a poner, una vez más, la sala incandescente para despedirse unos segundos.


AMON AMARTH regresan al escenario con los famosos cuernos de bebida para brindar con sus seguidores e interpretar “Raise Your Horns”. De nuevo reaparecen los vikingos portando sus hachas para la prestigiosa “Guardians Of Asgaard”, para desaparecer finalmente con la incendiaria “Twilight Of The Thunder God” y el Martillo de Thor puño en alto.


En resumen, colosal noche de metal la que vivimos en el Hangar burgalés lleno a rebosar. OMNIUM GATHERUM unos dignos invitados, siempre deslumbrando por la potencia y la actitud de unos DARK TRANQUILITY, que encaran esta nueva etapa con enormes ganas. Y triunfo abrumador de unos AMON AMARTH que continúan creciendo sin saber donde estará el limite.



Fotos y texto: Dani Díez