La tarde lluviosa no animaba a moverse de casa, pero si había dos buenas razones para ello, la primera era acercarse a Bilborock a ver la final de la Edición 27º del Villa de Bilbao que contaba con 3 bandas de lujo, NIKETZ, MANIPULATION y los ganadores THE FLYING SCARECROW, y como segundo plato y postre, la visita del mago de las seis cuerdas, MICHAEL SCHENKER en el Kafe Antzokia. No había sitio para la pereza, y me dirigí a Bilborock que presentaba sus mejores galas.
Tras visualizar las actuaciones de las 3 bandas participantes y la resolución del concurso, el Kafe Antzokia era mi siguiente destino. Al llegar a los aledaños del viejo teatro bilbaíno las camisetas negras de SCORPIONS, THIN LIZZY o Mr SCHENKER se apropiaban de la calle. Al entrar en el recinto los catalanes THE GOLDEN GRAHAMS ya estaban en pleno apogeo rockero. Repletos de adrenalina, energía y sobre todo actitud, el trio aprovechaba su tiempo de actuación desgranando temas de su álbum, “Deer Avenue”.
Temas con alta dosis de Rock &Roll sonaban “Today Is The Day” o “Bright Horns”, donde la velocidad y el machacón ritmo nos recordaron por momentos a LYNYRD SKYNYRD. Salvo el batería todo el grupo aportaba voces, dándole un toque muy dinámico a sus canciones. Tras un corto parón, en el que la batería de G. HalfVille interpretó un redoble de caja llamando la atención del respetable público, encaraban la recta final. Estaban gustando y se notaba. Su endemoniado guitarra Brian Nonell decidió subir por las escaleras a la segunda planta del Antzoki y desde allí dieron comienzo a otro corte arrollador que volvió a poner a tope a la audiencia, que rozaba el lleno. Así se despidieron estos 3 filósofos del Rock &Roll.
Pasadas las 23:00h de la noche y la sala en plena oscuridad, comenzaron a salir los protagonistas, sin más dilación encararon “Doctor, Doctor”, para delirio del personal, que los esperaba con muchas ganas. Siempre he pensado que es un error comenzar con una de tus canciones emblema, una de esas que el público espera ansioso, y en este caso creo me equivocaba. Fue un comienzo intenso y casi sin respiro, dieron paso a, “Live And Let Live” donde se apreciaba que musicalmente siguen siendo un valor seguro, con un Doogie White rayando a un gran nivel, Francis Buchholtz siempre seguro al bajo, Herman Rarebell una pieza clave a la batería, la sabía nueva del joven Wayne Findley a la guitarra y teclados, y la maestría y destreza del mago Michael Schenker. Músicos curtidos en mil batallas, que continuaron con “Lights Out” de su época en UFO. Un clásico que no se apaga.
Schenker se adelantaba hasta las primeras filas, con su pose característica, dando paso a “Where the Wild Winds Blow” de su “Bridge The Gap”, que sonó realmente bien y el respetable coreaba hasta la saciedad las melodías de guitarra y respondió en todo momento a las interpelaciones que les llegaban desde el escenario, dando paso a un tema con más solera, “Natural Thing”. Con “Before The Devil Knows Your Dead” y “Victim Of Illusion”, bajaron un poco el listón, estando algo fríos y estáticos, algo que normalmente tarda muy poco en contagiarse al público.
La actuación proseguía por su cauce con “Lovedrive”, disfrutando de una banda perfectamente engrasada y disfrutando sobre el escenario. El sonido fue digno del evento, al igual que el fuego de luces que tantas y tantas veces nos quejamos los fotógrafos. Las melodías más entrañables se apropiaban de la sala al escuchar las notas de “Coast To Coast”, un himno de la época de SCORPIONS que no pierde su carisma. De Mr Michael Schenker, ese menudo hombre reservado que cuando sube a las tablas se crece de manera descomunal, es capaz de llenar el escenario con su presencia y la de su fiel compañera, no pierde ni un segundo en agradar y tener complicidad con el público. Mantiene esa intensidad durante las dos horas de concierto, desde luego queda patente una vez más que la veteranía es un grado a su favor.
El vocalista Doogie White, se mostró cercano y simpático con los presentes y eso hizo que la complicidad fuera máxima para con el público, como curiosidad decir que hubo un momento que decidió sentarse en las escaleras para subir al escenario que generalmente siempre hay público sentado. Estuvieron brillantes en la ejecución y se entregaron al máximo, con el quinteto demostrando que se encuentran en un momento dulce de su carrera. La noche iba avanzando, le llegaba el turno a “Vigilante Man”, “Saviour Machine” o “Too Hot To Handle”, con el público coreando cada tema y con el calor, como uno de los protagonistas.

Los temas más reconocidos y eso se hizo notar, cantando todos al unísono, “Attack of the Mad Axeman”, “Communion” o la archiconocida, “Blackout” con la cual se despidieron definitivamente, entre aplausos y muestras de agradecimiento. Con conciertos como este queda patente el potencial que atesoran Michael Schenker y sus compañeros, gente que lleva toda la vida vinculada a la música.
Doctor Doctor (UFO song)
Live and Let Live
Lights Out (UFO song)
Where the Wild Winds Blow
Natural Thing (UFO song)
Before the Devil Knows You’re Dead
Victim of Illusion (Michael Schenker Group song)
Lovedrive (Scorpions song)
Coast to Coast (Scorpions song)
Vigilante Man
Saviour Machine
Too Hot to Handle (UFO song)
Lord of the Lost and Lonely
Rock You Like a Hurricane (Scorpions song)
Rock Bottom (UFO song)
Attack of the Mad Axeman (Michael Schenker Group song)
Communion
Blackout (Scorpions song)
Texto y Fotos: Dani Diez