Tras unos días de descanso y un poco de turisteo por la Bretaña Francesa con las pilas bien cargadas y con el ánimo por las nubes nuevamente nos dispusimos a afrontar la segunda parte del Hellfest que os contamos a continuación.
Jueves 23 de Junio
El primer día de la segunda parte del festival empezaba a la tarde y a eso de las 15:30 en el Mainstage 1 saltaron Phill Campbell & The Bastards Sons para interpretar un set exclusivamente lleno de clásicos de Motörhead donde vibramos un montón con Iron Fist, Damage Case, Rock Out o la inmortales Ace of Spade y Overkill. Gran actuación aunque un el sonido dejó bastante que desear . Llegaba el turno para una de las bandas que están inmersas en sus giras de despedida y nos referimos a los británicos UFO los cuales como siempre volvieron a dar una actuación brillante con un Phil Mogg que pese a sus 74 años sigue pletórico a las voces siempre acompañado por su fiel Vinnie Moore a la guitarra. Un concierto donde nos emocionó escuchar por última vez temas como Rock Bottom, Light Out o ese clásico entre los clásicos que es el Doctor, Doctor donde nos desgañitamos. Hasta siempre UFO, un placer!!.
Y siguiendo con las giras de despedida era el turno de presenciar lo que Whitesnake nos tenían preparado. Siendo sinceros hemos de reconocer que esta gira llega tarde y mal, el bueno de David Coverdale hace mas de una década que perdió su voz y hemos presenciado conciertos nefastos de él en los que se dedicaba mas bien a graznar. Pero esta vez el concierto hemos de admitir que no fue ese desastre que nos temíamos en parte porque la incorporación de Jesulik a las “teclados” y a los coros le salva al bueno de Coverdale de un montón de apuros y en parte porque mas sabes el diablo por viejo que por diablo y el vocalista sabe aún como seducir a su público con su blanca sonrisa. Así fueron cayendo todos esos clásicos que tan grande hizo a la banda como Fool For Your Loving, Is This Love, Here I Go Again o Still of The Night donde para sorpresa de todos apareció Steve Vai para interpretar el solo y poner eso patas arriba. Sorpresa que gracias a que Metalcry tenía un infiltrado en el equipo de Steve Vai ya la sabíamos con antelación. Un emotivo final en el que Coverdale no pudo contener las lágrimas al hacerse la foto de familia y que anticipaba la espantada que darían después en el Imperivm Festival de Cartagena y la cancelación del resto de la gira europea por supuestos problemas de salud.
Los siguientes en salir a escena eran nada mas y nada menos que Helloween y aunque el que escribe estas líneas nunca ha sido gran fanático de la banda ha de reconocer que Kai Hansen, Michael, Kiske y demás dieron un concierto la mar entretenido y sabroso. Gran perfomance escénica y con un Andy Deris que se comió con patatas a un Michael Kiske pasado de kilos y con una forma vocal que también deja bastante que desear. De hecho hasta nos sorprendió lo bien que Kain Hansen interpretó un extenso medley del Walls Of Jericho formado por Metal Invaders, Victim Of Fate, Gorgar y Ride The Sky. El resto pues lo esperado y disfrutando con Future World, How Many Tears y I Want Out. Concierto que nos dejó un buen sabor de boca.
Siendo sinceros hemos de reconocer que teníamos pánico ante lo que nos podíamos encontrar con Scorpions. Las últimas veces que habíamos visto a los teutones nos hicieron salir por patas pero afortunadamente esta vez todo fue diferente y nos dieron el conciertazo de la jornada. La edad parece que no le pasa factura a la garganta de Klaus Meine porque este señor dio un auténtico recital en un show mucho mas rockero de lo normal en ellos ya que pese a que sonaron unas cuantas baladas de rigor como Winds of Change o Still Loving You la verdad que esta vez la estructura del show estuvo mejor elegida y canciones como The Zoo, Bad Boys Running Wild y Blackout sonaron a gloria bendita. Pero la sorpresa estaba por llegar cuando en la final Rock You Like a Hurricane apareció Phil Campbell a interpretarla. Tras la despedida del escenario de Scorpions se quedaron Mike Dee y Phil Campbell, que era la primera vez que se juntaban en público desde el funeral de Lemmy. Tras unos emotivos clips con imágenes y vídeos de la vida del carismático líder de Motörhead los dos fueron caminando hasta la Warzone donde se encontraba la imponente estatua de Lemmy presidiendo el festival y depositaron en ella una bala que contenía sus cenizas, todo ello retransmitido en vivo por las pantallas gigantes. Un emocionante homenaje que nos hizo saltar alguna que otra lagrimilla y que puso punto final a una inolvidable jornada repleta de clasicazos.
Viernes 24 de Junio
El viernes lo comenzamos bien temprano con la descarga de Crisix y es que no nos podiamos perder el concierto de los de Igualada en el Mainstage 2. Lamentablemente Carry no pudo encargarse de los tambores por el maldito Covid y fueron los baterías de Tagada Jones y Gamma Bomb los que echaron una mano para que el concierto pudiera celebrarse. Lo de los catalanes es ya una historia de amor con el público francés que los ama con locura y que se entrego con frenesí a la descarga. De hecho hubo tanta energía que Busi y Requena acabaron en medio del mosh del respetable, gran concierto pese a la adversidad y ovación por todo lo alto. Tras la diversión que nos brindó Crisix era hora de volver a la carpa del Altar donde pudimos presenciar la devastación que Benighted dejó sobre el escenario, y es que ante su público los franceses demostraron porque son una de las bandas mas respetadas de la escena brutal death europea. Un show cargado de violencia y brutalidad.
Era hora de adentrarse en sonoridades industriales con Killing Joke, toda una leyenda de este género que dieron un maravilloso concierto y que nos serviría como aperitivo para lo que vendría después con Ministry y Nine Inch Nails. Pero antes era el momento de reencontrase con Kreator, una banda que a la que nos habíamos acostumbrado a ver unas cuantas veces por año y a la echábamos ya de menos. Pues bien pese a que su irregular y reciente Hate über Alles acaba de ser lanzado la banda se centro en un show muy conservador dónde solo sonó la canción que da título a su último disco. No obstante lo pasamos pipa con temas del calibre de Violent Revolution, Satan Is Real, Enemy of God o de esas monstruosas Flag of Hate y Pleasure To Kill que sirvieron de colofón a un show que demostró que el que tuvo retuvo y que Kreator gusté o no siguen siendo los putos amos de la escena thrash europea.
Justo a la hora que Ministry comenzaban su descarga el cielo se abrió sobre Clisson y el diluvio fue monumental como premonición a la barbaridad que íbamos a presenciar. Así que ataviados con nuestro chubasquero de rigor nos dispusimos a adentrarnos en el particular universo del Tito Al y los suyos. Un concierto que sonó demoledor de principio a fin donde un Al Jourgensen en plena forma nos fue martilleando la cabeza con clásicos del calibre de Stigmata, Burning Inside,, N.W.O o Just One Fix, incluso se atrevió con esa maravillosa versión que es Supernaut de aquel mítico álbum tributo a Black Sabbath. Pero no quedó la cosa ahí en la parte final del show tampoco se olvidaron de su sensacional último disco y cayeron Alert Level y Good Trouble. Sin duda un concierto inolvidable y de lo mejor que presenciamos en todo el festival pese a las adversas condiciones meteorológicas y no, no se me olvida el recital de pegada que nos dio Roy Mayorga a los tambores, todo un espectáculo.
Otro de los platos fuertes del día que teníamos en la agenda eran Marduk y la verdad que la decepción fue tremenda. No se si por la continua humareda que inundo el escenario o por el nefasto y horrendo sonido que hacía que eso fuese una cacofonía inaguantable, la verdad es que el show de los suecos fue bastante lamentable, algo que nos sorprendió porque siempre les habíamos visto grandes actuaciones. Y así para quitarnos el mal sabor de boca volvimos al Mainstage 1 para ver la actuación de Nine Inch Nails que nos dejó maravillados desde el minuto uno. Si antes habíamos dicho que el Tito Al esta en un estado de forma envidiable lo de Trent Reznor no es para menos con una impactante imagen visual los americanos se ganaron el favor del público desde el inicio de su show. Aquello volvió a sonar atronador y es que madre mía como estuvo sonando el Mainstage 1 durante todo el festival....un set basado mayoritariamente en su gran clásico The Downward Spiral era apostar a caballo ganador y es que temas como Mr. Self Destruct, Heresy o Closer nos pusieron los pelos de punta y que decir de ese emotivo y oscuro final con la despiadada Head like a Hole y la inmortal Hurt, pues conciertazo!!.
Para poner punto final nos dirigimos nuevamente a la Carpa del Temple para reencontrarnos con Decapitated y es que teníamos muchas ganas de volver a ver a los polacos tras las innumerables calamidades que les han pasado a lo lardo de los años y también por ver como defendían en vivo ese fenomenal nuevo trabajo que es Cancer Culture. Trabajo que sabedores de su calidad dieron buena cuenta de él y aunque Rasta tuvo algún que otro problema de sonido en su micro el concierto de Decapitated fue de notable alto y nos castigaron las cervicales a base de bien y es que temas como Sphere of Madness son toda una invitación a hacer un salvaje headbanging. Gran broche para otra estupenda jornada, esta vez pasada por agua.
Sábado 25 de junio
Tras las intensas lluvias que habían caído el día anterior y pese al gran trabajo de la organización el recinto mostraba zonas con bastante barro aunque posiblemente por ese trabajo no se formaron barrizales impracticables y así nos dispusimos a empezar la penúltima jornada del festival con Airbourne en el Mainstage 1. Los australianos son una banda tremendamente querida en Francia, ya que siempre que los hemos visto en Hellfest el público abarrota sus shows y lo da todo y la verdad que la cosa iba bien hasta que a mitad de concierto les dio por alargar las canciones, hacer cubatas en honor a Lemmy y tirar cervezas al respetable y convertir eso en una verbenilla. Igual sus incondicionales lo disfrutaron pero a mi me gusta ir a los conciertos a ver a las bandas tocar en lugar de hacer el simio pese a que su originalidad sea cero y se dediquen a fusilar lo que fue AC/DC.
Era hora de dirigirse hacia la Warzone y presenciar lo que sería una noche memorable para los amantes del punk/hardcore de la vieja escuela y es que ver a los padres de aquel movimiento llamado UK82 no es algo que se pueda ver todos los días. Las tres grandes bandas de aquello fueron Discharge, GBH y The Exploited y sólo un festival como Hellfest es capaza de reunir a esas tres leyendas en una noche memorable. Así que Discharge fueron los primeros en abrir fuego en un show que pese a que no tuvo un sonido demasiado bueno siempre es un placer disfrutar de los creadores del D-beat en himnos como Hear Nothing, See Nothing, Say Nothing, la incendiaria Protest and Survive o esa memorable y violenta The Possibility of Life's Destruction. Toda una masacre sonora que nos puso a tono para lo que vendría después.
Así mientras esperábamos el siguiente concierto de GBH nos volvimos al Mainstage 1 para ver como iba la cosa con Guns N Roses y allí nos encontramos a un Axl en un buen estado de forma física pero destrozando los temas sin ningún tipo de pudor, de hecho fue tal el esperpento que a parte de salir huyendo como alma que lleva el diablo nos preguntamos si no lo estaba haciendo a drede. Así que volvimos a la Warzone a presenciar la descarga de GBH y es que estos mítico veteranos están inmersos en la celebración del cuarenta aniversario de su disco debut, el esencial City Baby Attacked by Rats y del que dieron buen repaso con temazos como Time Bomb, mi favorita Sick Boy o Heavy Discipline. Aquellos sonó realmente acojonante y para terminar se marcaron un fabuloso cover del Bomber de Motörhead en homenaje al maestro.
A todo esto nos volvimos a dirigir al Mainstage 1 a ver que se cocía y si la cosa había mejorado y allí nos encontramos a Axl y Slash sentadicos en unas escaleras del escenario guitarra acústica en mano y empeñándose en destrozar su legado, las caras de sopor y sueño del respetable eran la mejor imagen de lo que allí estaba ocurriendo así que volvimos rápidamente a la Warzone para presenciar el que sería el concierto de la jornada. Y es que es muy difícil que The Exploited decepcionen, Wattie está en plena forma pese a sus numerosas intervenciones de corazón y la banda suena mas bruta que nunca. Los escoceses no hacen prisioneros y desde el minuto uno con Let's Star a War, que es toda una declaración de principios, pusieron una abarrotada War Zone patas arriba donde los pogos y pits fueron la constante de todo el concierto. No faltaron las clásicas The Massacre, UK 82, Alternative, Beat The Bastards o Fuck The System incluso aquello acabó como tenía que acabar con invasión de escenario en Sex & Violence y la final Punks Not Dead y es que pase lo que pase The Exploited son los putos amos en lo suyo. Así con una sonrisa de satisfacción de una memorable jornada donde el punk de la vieja escuela fue el protagonista nos fuimos a dormir, mientras no se si de fondo todavía seguían los alaridos de Axl....
Domingo 26 de Julio
Comenzábamos la última jornada del festival cansados pero ilusionados ante la que para nosotros era sin duda la mejor de las jornadas en cuanto a calidad musical y a las ganas que teníamos de ver a muchas bandas. El recinto volvía a estar en plenitud ya sin barro y sin nada y el solo volvía a brillar en las verdes praderas de Clisson. Así que sin mas dilación nos dirigimos a la War Zone donde Judiciary nos confirmaban que son una de las bandas a tener mas en cuenta en los próximos años dentro de la escena crossover. Se mueven en un estilo cercano a Power Trip y Enforced aunque le añaden una buena dosis de hardcore y su show nos pareció simplemente bestial. Sin perder un ápice de tiempo nos fuimos a toda velocidad al Mainstage 1 dónde Angelus Apatrida comenzaban su particular masacre. Los de Albacete dieron una lección magistral de puro thrash metal y el numeroso público allí congregado lo disfrutó un montón con innumerables circle pits. Temas como Indoctrinate, Give' Em War o You Are Next sonaron a gloria y demostraron el porqué Angelus Apatrida son una de las bandas mas en forma del panorama thrash mundial, muy grandes.
Nuestro siguiente objetivo no era otro que Midnight que pusieron el Temple patas arriba con su mezcla bastarda de Venom, Mötorhead y esa fiereza blacker. Sin duda fue el concierto mas macarra de los que vimos ese día donde Athenar nos martilleaba con su bajo y sus voces mientras Sor Of Satan no paraba de correr y saltar de un lado a otro del escenario con su guitarra. Una descarga de electricidad y macarrismo en estado puro. Los siguientes en descargar su set en el Altar serían Vltimas, el super grupo comandado por Dave Vincent en esta ocasión no tuvieron su tarde y si en anteriores ocasiones habíamos disfrutado bastante de su mezcla de death y black metal esta vez nos aburrieron bastante. Todo lo contrario que Terror que ofrecieron sin ninguna duda el concierto mas violento de todo el festival y es que los pogos, el circel pit y las hostias que se repartieron en la descarga de los angelinos fueron dignas de un combate de boxeo. Un concierto despiadado donde sonaron trallazos de la talla de Pain Into Power, título de su nuevo disco, Always the Hard Way, la brutalísima One With the Underdogs o ese cláscio que ya es Keepers Of The Faith ante una War Zone donde no cabía un alfiler.
Vuelta al Altar para ver la actuación de Memoriam y es que es estos veteranos del death metal nunca fallan en vivo con su death metal británico de la vieja escuela donde la pesadez es marca de la casa. Su vocalista el legendario Karl Willets pese a que ya no tienen esa voz de ultra tumba de sus inicios sigue haciéndolo muy dignamente y es que aunque ya no existan Bolt Thrower los Memoriam son lo mas cercano a ello que podrás ver. Nos trasladamos al vecino Temple donde primero Archgoat y después Mgla nos hicieron disfrutar de lo mejor de la escena black metalera actual. De los primeros diremos que nos impactaron en directo, nunca los habíamos visto y disfrutamos un montón de su descarga brutal, cruda y sin concesiones. De Mgla poco podemos decir ya, probablemente son una de las bandas mas populares del género y sus increíbles melodías nos trasladan a ambientes bellos y desolados a la vez, una vez mas los polacos la partieron.
Entrábamos en la parte final y pese a que somos muy fanáticos de Napalm Death, los malditos solapes hicieron que coincidiesen con Pentagram, toda una leyenda del doom americano, catalogados por mucha gente como los Black Sabbath americanos y como no sabemos el tiempo que les pueden quedar a los estadounidenses por la salud tanto mental como física de su lider Bobby Liebling nos decantamos por ellos. La verdad que fue un show correcto sin grandes alardes donde no faltaron clásicos del calibre de Be Forewarned, Relentless o ese increíble Forever My Queen. Buen show pero lejos de aquella actuación que me impresionó de ellos hace ya muchos años en París. Los siguientes en saltar a escena en el Temple no eran otros que Mercyful Fate comandados por el hombre de las mil voces King Diamond, que nos dieron toda una cátedra de lo que es el auténtico heavy metal. Aunque echamos en falta a Michael Denner en la segunda guitarra la verdad es que tanto King Diamond como Hank Shermann saben de que va esto y no se acompañan precisamente de músicos mancos. La cosa es que mientras el bueno de King se iba cambiando de atuendos en función de la ocasión allí sonaron temazos como The Oath, A Corpse Without Soul, Evil o Satan's Fall que hicieron que nos desgañitásemos intentando imitar los imposibles falsetes del Rey Diamante. También se atrevieron con un tema nuevo, The Jackal of Salzburg, un tema de casi 9 minutos de duración y que nos puso los dientes muy largos sobre un futuro lanzamiento. Un concierto que quedará en nuestra retina por muchos años ya que fue sencillamente memorable. Era muy alto el listón que había dejado Mercyful pero es que Carcass fueron lo mejor de la pasada edición y esta vez tampoco se quedaron atrás, los británicos en un Altar que en el que estábamos como en familia volvieron a demostrar el porque son una de las bandas mas grandes de la historia del death metal. Bill Steer, Jeff Walker y sus muchachos dejaron bien claro desde el minuto uno que ellos no venían a Clisson a pasar el rato y un concierto que empieza con Exhume to Consume y Buried Dreams es toda una declaración de principios. Teníamos muchas ganas de escuchar material nuevo de Carcass en vivo y Kelly's Meat Emporium, Under The Scalpel Blade y The Scythe's Remorseless Swing nos sonaron como canto de ángeles, algo que también lo hizo Keep On Rotting on the Free World, cuya intro fue Black Star de ese maravilloso e injustamente disco olvidado que es Swansong. Con Corporal Jigsore Quandary, Captive Bolt Pistol y Heartwork los de Liverpool terminaron su velada por todo lo alto y también terminábamos nosotros un edición histórica....por cierto parece que en el Mainstage 1 estaban tocando a esas horas unos tales Metallica.
